martes, 30 de noviembre de 2010

Bueno, pues pasó, lo que no tenía que haber pasado

Ayer día 29 de noviembre, mi esposa Herminia interpuso denuncia por agresión en la comisaría de policía de Avilés contra la ex – inquilina, si, si, la nueva amiga de mi madre, la que una vez desahuciada por la juez fue acogida por mi madre en su propia casa (desconozco si continua allí), si, la misma a la cual mi hermano el casado ayudo en el traslado de sus enseres y los guardo gentilmente en el bajo de su casa, mientras sus hijos, mis sobrinos, ayudaban también a realizar el traslado. La misma que el día del desahucio una vez que yo permití que se llevara todo lo que había en la casa (ya que una vez llegada la comisión judicial se da por abandonado lo que hay dentro de la vivienda, pasando todo a ser de mi propiedad), me amenazo verbalmente de forma considerable, claro que ya había sido increpado en su presencia por parte de mi hermanisimo, pero bueno todos lo conocemos, así que no descubro nada.
Pues paso como digo al principio lo que tenía que pasar, mientras a una elementa de este calibre se le siga protegiendo, se le siga haciendo fuerte, se crecerá, y en este caso agredió a mi mujer en el propio colegio de mi hija, afortunadamente la cría no estaba delante, fácil será que cuando se entere de la denuncia intente agredir de nuevo, mientras tanto algunos le seguirán dando alas, tal vez porque interesa, cualquier cosa que sirva para intentar destruirme a mí, interesa, solo hay que echar la vista atrás, no nos olvidemos que mi madre me acuso inventándose una historia cuya pena habría sido de cárcel, no nos olvidemos tampoco de las amenazas e intento de agresión sufrido por mí por parte de mi hermano, dicho sea de paso vestido de uniforme, lo cual creo que incrementa la bajeza de la acción, otros en cambio habiendo podido evitar todo o gran parte de lo que ocurrió, seguirán mirando para otro lado y durmiendo tranquilos, allá su conciencia.

No hay comentarios: